viernes, diciembre 09, 2016

La oscuridad de Andrómeda

¿Como de grande la veríamos en nuestro firmamento si fuese mucho más brillante?

Solemos asombrarnos de la belleza del Universo, de lo espléndidas y deslumbrantes que resultan las innumerables galaxias que observatorios como el Hubble fotografían constantemente. Pero no suelen ser una representación real de como las verían nuestros ojos, sino el resultado de largas exposiciones para captar la mayor cantidad posible de su tenue luz y la aplicación de técnicas gráficas para mejorar su brillo y resolución, para desvelar los máximos detalles posibles de su estructura. Y en no pocas ocasiones se mezclan frecuencias del espectro visible con otras que no lo son, nuevamente para extraer la máxima información posible. Al fin y al cabo todas ellas tiene un objetivo científico, por mucho que tengan una  difusión a nivel popular.

Andrómeda es la galaxia (sin contar las pequeñas satélites de la nuestra) más cercana a la Tierra, a "solo" 2.5 millones de años-luz. Para nosotros una distancia casi imaginable, aunque a escala cósmica es aquí mismo, y además se está reduciendo paulatinamente. Por ello es visible a simple vista, como una tenue mancha luminosa en los cielos Australes. Pero estamos hablando de un cuerpo celeste mayor que la Vía Láctea, al menos de 140.000 años-luz de diámetro. No debería verse mucho mayor? Al fin y al cabo apenas la separan de nosotros 20 veces su propio tamaño, una proporción mucho menor de lo que nos separa de La Luna.

La respuesta es que simplemente no brilla lo suficiente como para verla en toda su extensión. Lo que pueden ver los afortunados habitantes del Hemisferio Sur es el núcleo, el corazón de Andrómeda. Es resto, sus brazos espirales, una mezcla de estrellas, gas y polvo, quedan fuera de nuestro alcance, ya que no emiten tanta luz como para que nuestros ojos puedan captarla, situación aún empeorada por nuestra atmósfera. Si fuera más brillante, lo suficiente para verla en su totalidad, las cosas serían muy diferentes. Ya no sería una tenue mancha, sino una espiral asombrosa colgada en nuestro firmamento mucho mayor que la Luna Llena. Cuantas historias, leyendas y mitologías habrían nacido a lo largo de la historia humana si así fuera, cuan sencillo habría sido captar la auténtica naturaleza de las galaxias, en lugar de estar aún discutiendo si la Vía Láctea era o no la única hasta hace no tanto tiempo...

Y por encima de todo nos hace entender mejor lo que vemos con nuestros ojos, lo que vemos en fotografías, y el porque de las diferencias entre ambas. Y sobretodo entender que el Universo es un lugar oscuro, teñida de infinidad pero tenues puntos de luz. Por mucho que en ocasiones imaginemos lo contrario.

Andrómeda es la única galaxia, dejando de lado las compañeras de la Vía Láctea, que podemos ver a simple vista, aunque en realidad solo vemos su núcleo. Esa apariencia neblinosa, incluso con los primeros telescopios, hizo que hasta tiempos tan tardíos muchos defendieran que se trataba de una nebulosa de nuestra galaxia, no de otras galaxia situada mucho más allá. 

Yes, That Picture of the Moon and the Andromeda Galaxy Is About Right

1 comentario:

Unknown dijo...

Increíble, las galaxias son muy interesantes